5 consejos antes de empezar tu Bullet Journal

Es cierto que de un pensamiento a un hecho, sólo va un acto. Y me apena. Me apena ver libretas en blanco, bolis bonitos en estuches y e-mails que me dicen “cuando empiece en Julio mi Bullet Journal pondré esto, esto y esto.”

Vengo a ponerte un STOP en tu querido camino hacia la planning-peace, como le digo yo, porque sí, señoras y señores, a mi el Bullet Journal me ha dado una paz organizativa y mental que no sé explicaros. Hace ya un año exactamente que utilizo este método y te lo aseguro! Palabrita.

Me siento el Paulo Cohelo de las bloggers de organización y planners, y más cuando nos bombardean a colorines -culpable- washitape y pegatinas -no tan culpable- y hauls eternos de Aliexpress -a.k.a el paraíso de las bloggers de organización y planners, me incluyo, oigan- pero veo necesaria una entrada para trasladarte lo que pienso: El mejor momento para empezar tu Bullet Journal (y, ,en definitiva, cualquier cosa) es AHORA.

Y después de haberte contado cómo empezar tu Bullet Journal en cinco minutos, te voy a regalar cinco consejos que he ido coleccionando tras la experiencia para que lo hagas.

1. La libreta perfecta no existe

Quien lleve un tiempo usando una Leuchtturm me entenderá. Sí, es mi recomendación número uno para que empieces tu Bullet Journal, pero no necesariamente. Me explico, una Leuchtturm te va a dar páginas de puntitos, numeradas, un índice y un bolsillo detrás para guardar post-its, si me apuras. Pero si estás esperando a poderte comprar una para empezar tu Bullet Journal, estás equivocándote. Mi primer Bullet Journal, que ya tiene un año, fue una libreta de 1€ de TIGER. Tapas blandas, papel blandengue en el que traspasaban hasta los bolis bic y yo tan feliz llenándola día a día, oigan.

Por lo tanto, lo que te quiero transmitir, es que no esperes, puedes bulletjournalear hasta en post-its si me apuras! Ya habrá tiempo de tener una señora Leuchtturm.

2. Déjate de pensar colecciones y ponte a ello

Nos avasallan a colecciones. Y me siento culpable, porque yo también lo hice en una ocasión. Me he dado cuenta de que esto sólo provoca que os tenga pensando cómo hacer una colección u otra, y oye, no puede ser. Ponte a hacerla como quieras y puedas, comprueba que te funciona esa colección y seguro que más adelante, después del primer tachón, se te ocurre como mejorarla. Sólo entonces, mejorala.

3. Deja a un lado la inspiración

Este punto y el anterior, están tan cerquita que se dan la manita -oh, qué cursi me ha quedado esto-.

¿No te ha pasado nunca que te inspiras tanto para hacer algo -Pinterest, Instagram, blogs… cofcof- que acabas sin hacerlo y con una depresión de caballo, porque, oye, a mi no me va a salir tan bonito? Seguro que sí, a todos nos pasa y quien diga que no, miente.

Inspirarse para crear un Bullet Journal está genial. El problema es cuando esto nos frena a crearlo, y hasta que no tenemos claro cómo lo haremos no lo hacemos. Esto no sería un problema si lo hiciesemos, pero es que, al menos en mi caso, puedo pasarme meses queriendo empezar algo e “inspirandome”, cuando son meses que ya podría tenerlo hecho.

Inspirate, sí, pero pasa a la acción. 

4. Lo que le funciona a ella, igual no te funciona a ti

De nuevo y en línea con la inspiración. Tienes que encontrar a base de acciones qué es aquello que te funciona. La colección que le funciona a ella, que tiene dos hijos y planifica sus actividades en familia, no me va a funcionar a mi, que lo máximo que tengo que planificar en familia es cuando le quito las caquitas a mi querida Nela.

A todos nos encantaría tener una colección de libros, pero si no te gusta leer, oye, una colección de series no me parece tan mal. Es el puntazo del Bullet Journal, esa personalización que sólo puedes hacer tú.

5. Vive, escribe y planifica el hoy, no el mañana

Y mi último consejo es que no pienses más allá del hoy. Planifica tu día, haz el diseño de tu día, y deja el de mañana para… mañana. Así es cómo deberíamos vivir, y es lo que me gusta de este método, que te obliga a ser más productivo a base de planificar lo que has de hacer hoy y tenerlo que tachar sí o sí para mañana no volverlo a escribir.

En mi primera entrada lo dije y lo vuelvo a repetir, productivamente seremos más efectivos -y felices- si no vemos que tenemos más días para hacer algo que si los vemos, y si encima vemos que podemos apuntar que lo vamos a hacer ese día, algo va mal. 

Al menos a mi, saber que tengo que hacer una entrega un lunes y no ver que tengo el martes, miércoles y jueves para hacerla y mucho menos para apuntar que la puedo hacer esos días, me hace acabarla ese lunes. 

Expertas en Bullet Journal de estos lares... ¿Algún consejo más a añadir? 

¿Qué consejo fue básico para ti antes de empezar tu Bullet Journal? 

Y si no tienes Bullet Journal la pregunta es... ¿Vas a empezar ya? :P

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